sábado, 28 de noviembre de 2009

Trialera marinera


Después de muchos, muchos días sin poder quedar con Yoki, hoy por fin hemos salido juntos. Y ha sido un día de estrenos. Por primera vez he visto la flamante Specialized Epic Expert que monta mi amigo, y yo por mi parte estrenaba mis nuevos frenos, unos Avid Elixir 5. Yoki más contento que unas pascuas, y mis frenos han ido de menos a más, creo que cuando acabe de hacerles el rodaje funcionaran estupendamente. La ruta empezaba con la ascensión al Morti, bajada por la Font del Cul, que tiene una trialera guapísima y una vez abajo comenzábamos a subir hacia la Fundació. Allí descansito y a por el Galzeram. La bajada la hacemos por el sendero de Santa Maria, que sigue siendo uno de mis senderos favoritos, hasta Can Girona. De allí hasta el Coll de Can Corbera para bajar por una trialera hacia Vallromanes, que tiene un tramo ideal para caminar! Subimos la riera de Vallromanes hasta la Font de Can Gurguí, y continuamos hacia Sant Mateu. A la altura de Can Bernardó nos metemos en el sendero-trialera de la Trinxa09 hasta la pista de Can Maimó. De allí pasamos la Creu de Can Boquet hasta el Dolmen de la Roca d’en Toni. Aquí empieza lo nuevo de la ruta, seguimos un track del BTT-Badalona para bajar por la trialera del cactus. Nada más empezar casi tenemos una baja, Yoki hace el salto del tigre en un banco de arena, pero no pasa de ahí. La “trialera” es más bien un sendero, pero muy largo y divertido y por supuesto hay cactus. La trialera acaba en Vilassar de Dalt desde donde volvemos a casa entre carretera y paseo marítimo.

Las conclusiones que he podido sacar hoy sobre el cambio de bici de Yoki son:

Estéticamente es preciosa, ahora que ya no tiene la Yeti le he podido decir que no me gustaba nada, en cambio la SPE es una obra de arte, todos los acabados son SPEctaculares, y han cuidado hasta el mas mínimo detalle. La he cogido un minuto pero ha sido suficiente para comprobar que la horquilla SID aprovecha al máximo sus 100 mm de recorrido y que sistema Brain, es como tener un rígida, eso si, bajando el primer bache da un golpe y hace un ruido que parece que hayas partido la bici.

Si quedáis con Yoki llevadlo a un Bike Park en el que haya remontadores, porque el cabrón sube como un rayo, me ha destrozado. Pero bajar… eso ya es otra cosa, para bajar echa de menos la Yeti, y es normal, pasar de una enduro a una XC se nota y mucho. Hoy bajando ha estado miedoso y torpe, menudo carreteras(y payaso, y gilipollas…)jajaja. Pero en cuanto cambie el chip y se convenza de que no se le va a partir el cuadro y de que tiene unos frenos bastante más potentes que los de antes, ganará confianza y volverá a bajar como siempre.

Descárgate el track, o mira la ruta sobre el mapa y su gráfica.

Si me pongo un poncho y un sombrero mejicano pareceria el Far West

Prehistórica 09 a nuestro aire

El martes Carlos, el hombre que brilla en la oscuridad, Juan y yo decidimos hacer el recorrido de la Prehistórica de este año. Eso sí, dos días más tarde de la fecha oficial de la pedalada. Y es lo que tiene nuestro curro, que nos vamos al bosque y no nos cruzamos ni con elfos ni duendes ni gnomos...mejor así.
A las 8.40 llega el tren de Carlos y Juan a Granollers y yo ya les estoy esperando. Por el PR-C 36 nos dirigimos por Valldoriolf hacia La Roca. Camino conocido y una aproximación que nos gusta. Llegamos a Can Ribes y allí ya enlazamos con la Prehist, así que pista hacia Can Forns. Pedaleamos entre campos abonados y la visión de la prisión de Can Brians, giro a la izquierda y llegamos a Can Congostell donde disfrutamos del olor del Vallès rural. Humm qué bien huele el estiércol de vaca. En fin, seguimos pedaleando y enseguida llegamos a Can Solei, otra granja bovina. El track es nítido y nos toca pasar por dentro de la propiedad de la granja cosa que no nos gusta. Lo importante es que aquí empieza una subida calientapiernas, el zig zag de Can Solei es lo que se necesita para una pedalada, que se estire el grupo y luego el acceso a los senderos sea en fila sin aglomeraciones. Pero nosotros somos tres. Como siempre, voy el último. No importa, el pinar de Can Solei es cada vez más bonito. Y de repente: Ein? si esto es de nuevo el PR-C 36! zona conocida. Un atajo y llegamos a una pista que llanea. En un par de minutos estamos en la Pedra de l´Oreneta.

¿a que la tengo grande?

Llegamos a la urmanización Bosc d´en Ruscalleda y Juan y Carlos recuerdan los senderos por los que pasaron el otro día haciendo La Cabrilenca. De hecho nos metemos en uno de esos senderos pero en sentido contrario al que ellos hicieron el otro día. Llegamos a la pista que sube a Céllecs desde la Roca y para arriba. Desde ahí, a la izquierda aparece un sendero que nos ha de conducir por una trialera a Can Tarascó. Ya pasamos por aquí hace tiempo. Ah, sorpresa, el gepe y las señales que todavía quedan de la pedalada nos dice que a la izquierda. A partir de este punto, no hacemos otra cosa que enlazar un sendero con otro, que es lo que tiene mi querido Turó de Céllecs. En un ensanche soleado nos paramos a comer unas barritas y cuando ya queremos continuar empieza la bajada. El punto de descanso ha sido intuitivo pero muy acertado. Empezamos a bajar y nos plantamos a pocos metros de Sant Bartomeu de Cabanyes. Y ahí, volvemos al PR y bajamos por el sendero de los dolmenes. Personalmente he de decir que aquí lo pasé mal. Fui bajando, pero cada vez con más miedo, notaba que la bici se me descontrolaba, así que siendo prudente, me bajé de la bici en más de un tramo. No sé, supongo que del verano a esta parte apenas hemos hecho trialeras y todavía llevo el miedo de la caída en la Pedals. De nuevo pista y giro cerrado a la derecha para seguir el sendero de la Curva de Susto o Muerte. Más que un sendero es una rodada por una gran pendiente entre un montón de brezos cabrones (que ya sabéis que no me gustan nada. Juan baja disfrutando un montón y recordándole a Carlos que en la Cabrilenca también pasaron por ahí. Carlos duda y se baja en más de una ocasión. Excusa perfecta para mí, así que también me bajo. Por fin, llegamos a la Curva y directos a la riera de Sant Bartomeu. Uno de los puntos más bonitos de la ruta por motivos paisajísticos.

Soy egocéntrico, hago yo la crónica y cuelgo una foto mía.

Sendereamos, cruzamos la carretera, llegamos al Bosc de les Pedres de Can Vidalet y por la SerraAmeia nos dirigimos al Coll de Parpers. Antes de llegar en una explanada soleada, comemos. Ya queda poco para acabar y llegar comido al tren y a casa siempre es de agradecer. De Parpers, por el GR92 nos dirigimos a Can Fonrs. A nivel personal creo que este sendero es lo mejor de toda la ruta. Divertido. Bonito. Llegamos al Torrent de Bracons y aquí si encontramos durante un par de kilómetros un paisaje de bosque de ribera delicioso. Hey, bonito y rápido así que:
Hey Juan, sabes que es esto? estamos cerca de Can Rafel, te acuerdas del hielo que había la primera vez que pasamos, buf qué frío. En realidad esta masía se llama Can Companys de Dalt y espero no olvidarme ya del nombre porque como digo este bosque de ribera es precioso.

Ahora cruzamos la carretera y...el sendero más friki de la ruta. Se notaba que lo habían abierto para la pedalada, no sé si antes era más ancho, pero ahora entre brezos y una robledal espesísimo con robles muy jóvenes se nos hace difícil pasar por algunos puntos de lo estrecho que es. Acabamos este sendero y ya llegamos a los kilómetros basura de la pedalada. Por un lado, la llegada al pueblo por pista ancha y llana, y por otro, en nuestro caso, hemos de iniciar la pedalada, también por pista ancha y llana hasta Can Ribes. Volvemos por Valldoriolf hacia Granollers y, y ya está.

Me ha gustado como han compensado las pistas con los senderos. Pistas para subir, Can Solei y Bosc de Céllecs, y senderos para pedalear, Turó de Céllecs, sendero de los Dólmenes hasta Can Vidalet, bajada de Can Forns y por último el sendero final de Mallols.
Sin haber llegado al pajarón que me dió el otro día, si que tanto senderear (al menos con respecto las rutas anteriores de este otoño) me ha resultado más duro que de costumbre.

Descárgate el track, la imagen de la ruta sobre el mapa o la gráfica.

jueves, 19 de noviembre de 2009

La Cabrilenca


Otro acierto más. La "Trinxa" la hicimos por recomendación de Yoki y fue un éxito rotundo. La pedalada de Llinars fue chulísima, a pesar de lo que se pueda deducir del post que escribió Mac, que estaba incubando una gripe que lo dejaría KO unos días, y por eso le perdonamos. Pero lo mejor estaba por llegar. La Cabrilenca es espectacular casi en todo su recorrido. Carlos y yo, como no disponemos de coche tuvimos que hacer un experimento para llegar a algún punto de la ruta. Y en vez de llegar a Premià y subir por la riera, pues decidimos ir a Granollers y seguir el PR-36 hasta el Bosc de Céllecs, por donde pasa la ruta. Cabe decir que nosotros empezamos la ruta en un punto en que la pedalada ya llevaba un tercio de su recorrido, asi que el orden de senderos está alterado. Nada más llegar a la ruta empezó una sendero-trialera muy guapo que acababa en la curva de "susto o muerte" en la que Aaron un día explorando la zona nos demostró su habilidad técnica. Seguimos por el Torrente de Sant Bartomeu hasta la carretera e iniciamos el ascenso hasta el Turó d'en Gall, cuyo descenso acaba en la pista que lleva de la cantera al Coll de Parpers... Parpers, Parpers, Parpers, Parpers... y rápidamente cogemos otro sendero hasta Can Roviró. Poco a poco comenzamos una subida que deja de ser una pista para ser un sendero con varios regueros que nos impiden llegar arriba sin poner el pie en el suelo, y así llegamos a Òrrius. Pasamos por Ca l'Altafulla y seguimos a la derecha por un sendero zigzagueante que nos estruja las fuerzas. Conectamos con una pista principal que nos lleva por el Coll de la Gironella hasta Cabrils. En Cabrils encontramos la Trifactory Bikes, una tienda de bicis enorme, en lo que parece una antigua nave industrial, y como somos unos curiosos, no podemos evitar entrar y echar una ojeada. Al momento salimos para encarar una subida aburridísima hasta la famosa Mutua de Cabrils, y de repente estamos otra vez en el Coll de la Gironella. La ruta baja a Cabrils porque es el municipio que la organiza pero no vale la pena pasar del Coll de la Gironella, así que si la repetimos nos ahorraremos unos 9km aprox. En seguida pasamos el Coll de Porc y giramos dirección a Sant Bartomeu, pero antes de llegar a Ca la Mort nos desviamos a la izquierda para coger el PR dirección al Turó de Céllecs, antes de llegar a la cima seguimos otro sendero esta vez en bajada, muy rápido, divertidísimo y con un paisaje espectacular, lo mejor de la ruta sin duda. Incluso se atraviesa una riera sobre dos tablones, pero hay que decir que ni Carlos ni yo lo hicimos pedalenado, andandito que los dientes son para toda la vida. Entre un sendero y otro y algún tramo de pista llegamos a la Pedra de l'Oreneta y al punto exacto donde habíamos iniciado la ruta. En estas ya solo nos quedaba volver al tren y lo hicimos por el camino más directo, carretera de la Roca hasta Montornés, cruzamos el polígono y en Montmeló el tren a casa. En total más 60 km, muchos sendero y para mi la mejor ruta que he hecho hasta ahora, estoy emocionadísimo.
Puedes bajarte el track aquí

viernes, 13 de noviembre de 2009

Pajarón pistero

El jueves por la noche asistí a uno de los mejores conciertos del año. Como soy muy listo, me fui sin cenar y luego me acosté cerca de la una. Pa chulo yo!

Por la mañana me levanto y la vuelvo a cagar. Me paso de salida en la autopista, kilómetros antes de Llinars se me enciede el chivato de falta de aceite en el motor, parada de urgencia en una gasolinera, 42€ para remediar el desastre y al llegar por fin a LLinars me pierdo y me paso media hora para llegar al punto de encuentro que no es otro que la estación. Manda huevos!! ¿Cómo no encontrar en un pueblo pequeño la estación de la Renfe? pues siendo Mac. Cagon la puta.

Juan, Carlos y yo iniciamos la ruta que en sí es suave y pistera. Accedemos rápidamente a Collsabadell, llegamos a Sant Sadurní de Collsabadell. Parada y fotos. Las únicas de toda la salida. Seguimos para alante ascendiendo suavemente y llegamos a Can Ferrerons. El track aquí hace un bucle bastante absurdo con idea de meternos en un sendero. El sendero está bien, pero si no lo hubiesemos hecho tampoco hubiese pasado nada. Un poco más adelante llegamos a un sendero en bajada que para mi gusto fue lo mejor del recorrido. Ese sendero es muy poco técnico, pero rápido y empinado lo que lo hace muy divertido. Una vez descendido continuamos hasta Can Rafel, aquí tenemos el lujo de cruzarnos con Rompetechos, un yayo de mil quinientos años, cegato perdío al volante de un coche en medio del bosque. Continuamos subiendo, pero suave suave. Desde aquí, sin el gepe sería imposible seguir la ruta, no parece tener ningún sentido. Enlazamos pista con pista, algunas por senderos muy cortos otras por antiguas pistas que el bosque se va comiendo. En seguida llegamos a una pista principal y aquí mi pájara ya es considerable. Si habitualmente soy lento hoy ha sido peor. Nos paramos en esa pista principal y almorzamos algo. Además del pajarón ahora tengo algo de frío. Vamos para bingo.

Seguimos la pista y pasamos por El Trull. Juan dice: ey, Mac ¿sabes donde estamos? en la pista de Sant Celoni a El Corredor. Bueno, ahora ya es terreno conocido. Ascenden Carlos y Juan y yo simplemente me conformo con mantener el equilibrio y llegar arriba. Llenamos los bidones de agua y continuamos, ahora ya sí en bajada pues éste es el punto más alto de la ruta. Aquí, por arte de birlibirloque se nos unen tres ciclistas más con ánimo de descubrir una buena bajada hacia Llinars. Por un par de senderos típicos de esta zona (rápidos, rápidos pero sin ningún reguerón), llegamos al Solei del Corredor. Siempre que es bajada, parece que voy bien, pero en cuando he de pedalear mínimamente ni puedo con mi alma. Bajada por la pista de Les Pedres d´en Mataró hacia el Coll del Pi d´en Buac, pero antes, en el Coll del Bruc giramos a la derecha y por pista iniciamos un pequeño sube baja que nos conduce hasta la pista principal de Can Bordoi al Corredor. Una vez en la pista, en seguida llegamos al desvío de Can Miloca. Bajamos hasta la masía y descubrimos los primeros senderos realmente interesantes. De hecho, un poco más adelante pasamos por la única trialera, que hasta sorprende y nos hace sospechar después de una recorrido tan y tan pistero. Superada la trialera, los compis dicen que ya no quieren subir más y que abandonan el barco. Juan, siendo todo un caballero, mira el gepe y decide que se puede continuar sin subir. Mejor porque voy muerto. Ay, pero mi dicha dura poco. Hay que girar a la izquierdo y subir una mortirolada. Al final los tres ciclistas nos abandonan y por el subidote que yo hago andando llegamos a un collet que ya sí que enlaza con la bajada prometida a Llinars. De hecho, éste es sin duda el mejor sendero de toda la ruta. Además a izquierda y derecha se ven otros sesnderos y rodadas y eso nos da ánimo. Al final llegamos a una viña semi abandonada y en un plis llegamos al final del recorrido.

Vaya una puta mierda de salida: yo pajarón, el recorrido esencialmente pistero, el paisaje muy marítimo, es decir, soleado y seco, con mucho pino y brezo, pocas subidas mortirolas y solo dos puntos de agua: El Corredor y el Solei. Lo mejor sin duda han sido los paisajes de de Collsabadell hasta Can Ferrerons y un poco más allá, y luego una vez pasado Can Miloca.

¿Repetir esa zona? sí, pero buscando "ascender menos" y disfrutar más de la vertiente vallesana que es la que tiene el puntito.

I vet aquí un gos i vet aquí un gat i aquest conte s´acabat.

Puedes bajarte el track aquí

lunes, 9 de noviembre de 2009

La Trixacadenes 09 a nuestro aire

Otro día más ha tocado madrugar para hacer un experimento. El reto de hoy era la completar el recorrido de la Trinxacadenes, que tuvo lugar hace un par de semanas en Vallromanes, y en la que participaron Yoki y Don Limpio. Y como ellos no se han animado a hacer la entrada del blog pues Mac y yo nos hemos puesto manos a la obra, muy a nuestro pesar. Porque aunque cada vez que pasemos por la zona se nos caiga la baba con los senderos, y la única vez que pasé por la zona mas técnica del recorrido hubiera dado cualquier cosa por tener una bici entre mis piernas, bajo ningún concepto queríamos ir por allí ;-)
Así que a las 7:50h aprox ya estábamos dando pedales por la riera de Vallromanes dirección Font de Can Gurguí, para seguir por la carretera de la Cornisa hasta el mirador. Justo pasar el mirador se coge a mano derecha un sendero de bajada super divertido, se enlaza con una pista que acaba en Cal Bernardó. Se cruza la pista principal y empieza la que para mi es la zona más divertida de la ruta. Primero un sendero que atraviesa el bosque y después UNA TRIALERA, SÍ SEÑOR, UNA TRIALERA. Me lo he pasado teta. Acabamos en la pista que va de Can Maimó a Can Boquet, y justo en Can Boquet cogemos la pista de Cabrils y subimos hacia el Dolmen de la Roca d'en Toni pasando por la Font d'en Dirol. Seguimos dirección Argentona, pero nos desviamos hacia Órrius, y de allí hasta la pista principal otra vez dirección al Coll de Porc. Justo antes de llegar nos metemos por un terreno privado, cruzamos por el margen de un campo labrado y encontramos un sendero de bajada. Pronto este sendero está impracticable, el propietario del terreno ha decidido prohibir el paso a las bravas, cortando arboles y dejándolos en medio del camino con toda la mala fe del mundo. Eso nos ha supuesto casi una hora de penurias hasta salir a la pista de la Font Freda, que seguiremos hasta el Turó d'en Lloberes. La bajada hasta Can Maimó es bonita y por sendero. Ya estamos a punto de acabar, pero queda la sorpresa final. La subida al Turó de Can Tabac, una subida por un sendero con suelo húmedo y resbaladizo que nos ha obligado a poner el pie en el suelo muchas veces, casi hasta desesperar. Una vez alcanzada la cima empieza una bajada divertida hasta las primeras casas de Vallromanes. A partir de aquí nada destacable, llegamos a la Riera y al coche enseguida.
Seguiremos explorando.
Descargate el track aquí o mira las fotos aquí

martes, 3 de noviembre de 2009

Saw I y Saw II



Todo empezó hace más de dos años. Una fría mañana de septiembre Pablo y yo decidimos volver a juntarnos después de muchos meses sin hacerlo. El escenario elegido fue el pantano de Sau. Decidimos hacer una ruta circular que iba del pantano de Sau al de Susqueda. La cosa iba de maravilla, hicimos los 25 primeros km sin ningún tipo de contratiempo, pero al pasar Susqueda empezaros los problemas. Solo llevábamos una pequeña reseña de la ruta, y sin GPS ni mapa no tardamos en perdernos. Durante más de cinco hora estuvimos probando una pista tras otra, pero ninguna tenia pinta de llevarnos a Sau y mucho menos a una zona habitada donde encontráramos a alguien que pudiera ayudarnos. A las 17h se cebó con nosotros la mala suerte, en apenas 200m pinchamos 4 veces, y solo llevábamos 3 cámaras. Así que estábamos perdidos, con las bicis averiadas y con la noche pisandonos los talones. Íbamos a pringar por pardillos. Pero a veces la suerte no es tan perversa y por fortuna encontramos una casa en la que estaban celebrando una reunión familiar. Los propietarios nos ofrecieron comida y dejarnos en un punto próximo al coche. Nos dejaron a 12km del coche con un día ya moribundo, que en menos de 10 min, mientras Pablo bajaba a por el coche, y yo esperaba con la bici averiada, se convirtió en noche cerrada. Esta vez la historia acabó bien, Pablo me recogió y nos fuimos a cenar a un buen gallego. Nos lo habíamos ganado.
La segunda parte es más feliz, pero no nos librariamos de un susto. Parece que el titulo de la peli de terror fue inspirado por las malas experiencias que he sufrido yo ese maldito pantano de nombre homófono.
A las 8.13h ya estábamos cruzando la presa de camino a Sant joan de Fabregues, donde visitaríamos la rectoría y haríamos varias fotos, a ella y al paisaje. Pero primero pasaríamos por la masia Aulet y el Pla de Pendís. Empezamos un descenso por una pista preciosa que tenia "el azul en el cielo, el verde en las paredes y el amarillo en el suelo", o lo que es lo mismo, un bosque de castaños con toda la hojarasca en el suelo. Rodeamos el Turó de L'Agullola por una zona de toboganes con subidas técnicas hasta Can Sant Pau. Y de ahí seguimos por un falso llano hasta Sant Martí Sacalm contemplando a la derecha un bosque de eucaliptos. Después teníamos una bajada larguísima y pronunciada hasta la presa de Susqueda, que cruzaríamos y enlazaríamos la pista por la cual pase la vez anterior. Pero como esta zona me odia, nos encontramos una obra en la presa que nos impedía cruzarla. Se me vino el mundo abajo, no podía ser que otra vez que quedara tirado allí. No conocía los alrededores ni la forma de pasar al otro lado. Pero Mac tuvo más sangre fría que yo y me dijo: bajando esta pista hay un puente que nos cruza el río y nos lleva a la carretera que sube al otro lado de la presa. Y así fue. Apenas 4km más tarde ya estábamos al otro lado, enfrente de la pista que nos llevaría de vuelta a Sau y que yo había hecho en sentido contrario. La pista es bonita, bastante llana y siempre con vistas al pantano, pero los putos domingueros y el ayuntamiento al que le corresponda deberían solucionar unos pequeños vertederos en los bordes de la pista que estropean el camino. Al final de esta pista encontramos una bajada pronunciada que precede a un rampote de hormigón justo antes de la presa de Sau, que nos hace estrujarnos por última vez.
Por fin me he quitado una espina, que mas que una espina era una estaca
Puedes ver las fotos aquí
Si clickas aquí puedes descargar el track de la ruta, en el caso de que las obras estén acabadas al pasar por encima de la presa te ahorras 4 km, pero hay una fuente en la carretera, así que igual vale la pena dar la vuelta!!!